Saber cómo reaccionar ante una situación en la que debas atender heridas menores como cortaduras o raspones, puede resultar de gran ayuda, ya que en cualquier momento podrías estar listo para auxiliar a alguien que lo necesite; Curitas® te dice cómo lograrlo:
¿Cuál es el conocimiento básico de primeros auxilios para heridas menores?
Antes de comenzar, Curitas® quiere recordarte que se considera como herida grave aquella en la que no cesa una hemorragia, es de un tamaño mayor a tres centímetros, tiene cuerpos extraños clavados, presenta riesgo de dejar cicatriz o ha dañado articulaciones, músculo, piel o hueso.
Si has determinado que la herida que ayudarás a atender es menor, Curitas® te recomienda seguir los siguientes pasos básicos de primeros auxilios:
- Lávate las manos con agua y jabón.
- Lava la herida que atenderás con agua y jabón neutro.
- Limpia y retira cuerpos externos como piedras, tierra o astillas.
- Aplica Curitas® spray limpieza antiséptica en la herida para evitar infecciones.
- No uses algodón, ya que sus fibras podrían quedar en la herida.
- No utilices alcohol, porque puede dañar la piel.
- Cubre la herida con una gasa y fíjala con Curitas® Cinta Microporosa.
- Si la herida es aún más pequeña, protégela con Curitas® tela elástica.
Ahora que conoces un poco más sobre los pasos básicos de primeros auxilios para heridas menores, Curitas® te recomienda echar un vistazo a los productos que debes tener para armar un botiquín de primeros auxilios.
Finalmente, Curitas® también desea recordarte la importancia de asistir a un médico en caso de detectar algunas anomalías en tu herida como sangrado abundante, infección, inflamación, si tiene algunos objetos externos que no puedas retirar o en caso de cualquier situación incierta.